Soy Ingeniero en Sistemas y tengo más de 18 años de experiencia en computadoras, pero hace unos 7 años cambié a usar únicamente computadoras Apple©... Todavía creo que alguien puede usar Windows© e ir al cielo, pero.... LOL. Es broma.
El asunto es que al disponerme a configurar esa computadora el lunes, me tomó casi 3 horas. Al encender la computadora, tuve que esperar más de media hora para que hiciera su auto-instalación inicial, tuve problemas para acceder al Internet, tuve problemas para instalar antivirus, tuve problemas para instalar Office© desde el Internet... fue traumático. 3 horas de pie en una tienda... Lo único que me pasaba por la mente era: Configurar un iPhone o iPad tomaba máximo 5 minutos... Configurar un Laptop Apple tomaba 10 minutos máximo... Instalar una aplicación, toma breves minutos, no media hora... Había una diferencia impresionante al experimentar ambas computadoras... ¿Cuál era el problema?
En la tienda y por teléfono quisieron hacerme pensar que el problema era yo... Definitivamente el problema es "El Ingeniero"... pero al recordar otras experiencias, incluso con Windows©, esto que me estaba sucediendo era totalmente nuevo... Entonces, ¿Era el "Ingeniero" el problema?... "No es el Ingeniero. Es la Computadora"... La computadora tiene Windows 8©, el cual tiene una popularidad de un 50%...
El terreno en el cual estaba tratando de trabajar, no era un terrero fértil, ni cómodo, ni seguro... y en general, era un terreno malo... Esto me puso a pensar en la Parábola del Sembrador que Jesús usó.
3 Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: “El sembrador salió a sembrar; 4 y al sembrar, parte de la semilla cayó junto al camino, y vinieron las aves y se la comieron. 5 Otra parte cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra; y enseguida brotó porque no tenía profundidad de tierra; 6 pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. 7 Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron. 8 Y otra parte cayó en tierra buena y dio fruto, algunas semillas a ciento por uno, otras a sesenta y otras a treinta.
¿Cuál es el problema en la historia? ¿La semilla? ¿El sembrador? ¿Qué es lo que está mal? El problema es la tierra, o sea, nuestro corazón. El Sembrador, que es Jesús, y la Semilla, que es la Palabra de Dios, no tienen ningún problema. La Semilla cayó en diferentes lugares y tuvo diferentes resultados... Al igual que la computadora, mis técnicas, ni mi experiencia eran el problema... No es el Ingeniero. Es la Computadora. No es el Evangelio, ni la predicación, ni la oración, ni las canciones, ni los programas, ni los Estudios Bíblicos... el problema es la preparación que tienen nuestros corazones para recibir dichas cosas...
Al igual como en la computadora, el problema no es el Ingeniero, sino la computadora, de la misma manera, en nosotros el problema no es el sembrador (Jesús), ni la semilla (La Palabra)... el problema somos nosotros y nuestro corazón. Jesús es el mismo, La Palabra es la misma, pero nos toca a nosotros tener el terreno de nuestro corazón limpio y fértil para que el evangelio pueda tener fruto en nosotros. No que debamos ser santos y libres de pecado para acercarnos a Dios, pero SI debemos tener un entendimiento de quiénes somos (pecadores perdidos) y de quién es Jesús (el Hijo de Dios, nuestro Señor y Salvador).
Jesús está listo y sigue lanzando la Semilla de la Palabra, pero para que surta efecto en ti, deberás preparar tu corazón...
¿Cómo está el terreno de tu corazón? Recuerda que No es el Ingeniero. Es la Computadora.
JUST SAYING!!!
Pastor D
David Pimentel
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