lunes, 25 de marzo de 2013

3 Minutos Más

La semana pasada me pasó algo con mi hija Camila. Luego de acomodarla para dormir, orar con ella... todavía tenemos que durar un tiempito con ella para que se quede dormida, pero la semana pasada, yo había tenido un día difícil... uno de esos días que parecen tener 40 horas. Al llegar esa noche a la casa, jugamos un rato, cenamos, yo recogía la cocina y mi esposa Yokasta bañaba y vestía a Camila para dormir.

Yo entré a su cuarto y, aunque mi esposa y yo estábamos listos para dormir, Camila no lo estaba. Ella estaba jugando en su cama y lo supe: El día no se terminaba todavía. Me acerqué y leí la Biblia para ella, hablamos de la historia y oramos juntos. Luego de unos minutos, ya yo no "aguantaba" más y simplemente le dije: "Duérmete mi amor..." Le di un beso y la dejé sola. No había llegado a mi habitación cuando ya Camila estaba llorando y tuve que regresar al cuarto. 

Molesto, entré y le dije: "Duérmete... Tienes sueño y nosotros también... Sólo duérmete..." No le hablé muy bien y me sentí mal, así que la levanté, la abracé, le pedí perdón y la acosté nuevamente... En 3 minutos Camila estaba durmiendo.

Anoche me pasó igual. Camila tuvo un fin de semana LLENO de actividades. Fiesta de Máscaras, Fiesta de Pijamas con sus dos primitas favoritas (Jancelly y Jansly), Parque de Diversiones, Cine... Al llegar a la casa, sabíamos que estaba cansada, pero que podría no querer dormirse. Mi esposa la preparó para dormir y yo le preparé cereal. Mientras ella comía su cereal, yo le leía su historia favorita en la Biblia: "La Multiplicación de los Panes y los Peces". Al terminar, la acosté y la acomodé... oramos juntos y cuando ya yo no "aguantaba" más, recordé la semana pasada... recordé lo mal que me sentí al hablarle más y decidí esperar... En 3 minutos Camila estaba durmiendo.

Lo que quiero regalarte hoy es el siguiente pensamiento: No te rindas, porque puede que sólo falten "3 minutos" para lo que estás esperando en Dios. No desmayes porque puede que sólo falten "3 minutos" para que se abra la puerta que tanto has esperado.

Aprendamos no sólo a esperar a Dios... sino a esperar en Dios. Si esperas a Dios quiere decir que estás lejos de El y ya Dios no está contigo... Si esperas a Dios, quiere decir que te has alejado porque lo que las cosas que Dios te da son más importantes... 

Si esperas EN Dios, siempre tendrás A Dios... y las cosas que "te hacen falta"... se harán secundarias para ti, pero primordiales para Dios. El promete que si lo buscas primeramente a El, recibirás lo demás como un agregado. (Mateo 6:33 NBLH).

Pero los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas. Se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán.

JUST SAYING!!!

Pastor D
David Pimentel

1 comments:

Anónimo dijo...

Cada vez que estoy listo a rendirme, Dios me habla. He pasado momentos muy dificiles en mi matrimonio y muchas veces he decidido alejarme y separarme por completo. Cuando estoy listo para hacerlo Dios me habla en voz audible o por medio de una lectura. Ayer en nuestro servicio el pastor dio un sermon, y decia "cuando crees que tus tecnicas humanas serviran y te das cuenta que en verdad no puedes usarlas porque no funcionan, humillate a Dios y el te dara la salida". Anoche fue un momento muy dificil donde una ves mas fui humillado y herido, y hice eso excato- ore a Dios y aun estoy esperando su respuesta. No es facil, pero gracias a Dios por seres como usted que trae palabra de aliento. Benciones!

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