lunes, 25 de noviembre de 2013

Comprometidos... No Enamorados

Era tu primer pensamiento en la mañana. El último suspiro en la noche. Cada minuto, tus suspiros volaban hacia el mismo destino. Leías todo lo que te escribía... De vez en cuando, hasta tu le escribías. Hablaban a cada momento. Sentías mariposas en el estómago y veías como se erizaba tu piel cuando alguien mencionaba ese nombre. Pero al pasar el tiempo... Jesús se hizo común... la emoción mermó... estuviste enamorado, probablemente no comprometido. Habías perdido el "primer amor".

4 Pero tengo esto contra ti: que has dejado tu primer amor. 5 Recuerda, por tanto, de dónde has caído y arrepiéntete, y haz las obras que hiciste al principio. Si no, vendré a ti y quitaré tu candelabro de su lugar, si no te arrepientes.

"El Primer Amor", es una frase muy usada entre los cristianos. "Perdiste el primer amor"... "No descuides el primer amor"... pero leyendo el pasaje, veo que la interpretación que damos, no es del todo correcta.

El cristianismo no es sensacionalista ni basado en emociones, pero nosotros, como seres humanos integrales, somos seres que involucramos nuestros sentimientos en todo... y eso está bien... en su justa medida, claro...

Veo que en el pasaje, Dios, hablando en boca de Juan, no nos dice: "Han dejado de sentir lo que sentías al principio...", dice "han dejado de hacer las obras del principio"... Lo primero es enamoramiento... lo segundo es compromiso. Al inicio te enamoras de la verdad, pero en algún momento debemos COMPROMETERNOS con la verdad... Así nunca dejaremos de "hacer las obras del principio".

Nuestra relación con Dios es orgánica y por eso necesita que nuestros sentimientos estén involucrados, pero por la misma razón, nuestra acciones deben ser consecuentes con nuestras convicciones, porque es lo único que removerá del paisaje un divorcio espiritual.

Cuando la Biblia habla del primer amor... No habla del amor del principio solamente... Habla del amor principal en tu vida... Ambos se expresan con sentimientos como el enamoramiento, pero ambos se consolidan cuando nuestras acciones son controladas por esa relación establecida.

¿Sientes que has perdido tu "primer amor"? Quizás has dejado de actuar consecuente con ese "primer amor"... Es diferente leer la Biblia para terminarla, que leer la Biblia para conocer a Dios... Es diferente orar para cumplir, que orar para conversar. Es diferente estar sólo enamorado... que comprometido.

Que el enamoramiento de Dios, no nos paralice... Que el accionar por Dios, no nos desenamore...

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