viernes, 9 de septiembre de 2011

No Quejas

Es increible que habiendo escrito lo que escribí ayer, tenga que escribir lo que escribo hoy. Y no escribo como dominador del tema sino como persona consciente de la importancia del mismo No es trabalenguas... Es que yo mismo no lo podía creer.

Ayer escribí acerca de remontarnos sobre las dificultades para volar más alto. Al terminar de escribir, le pedí a mi esposa que compartiera el devocional del día en Facebook© mientras yo me preparaba para salir, pero en eso momento ella me comunicó que me dejaría en el trabajo para llevar la niña al hospital porque estaba muy congestionada. Y ahí comenzó todo.

Mi carro volvió a dejarnos en el highway, ahora con la necesidad de llamar a una grúa. Tuvimos que esperar a un amigo que recogiera a mi esposa y mi niña para llevarlas a buscar el carro que tenemos prestado. Todo bajo una lluvia preciosa. Al llegar al taller, me dieron el golpe... no físico... sino monetario, porque usted sabe que los latinos arreglamos carros mientras que muchas otras culturas le dan mantenimiento y eso los ayuda a estar preparados.

Tuve que dejar mi carro en el taller y esperar que alguien me recogiera para ir a juntarme con mi esposa y llevarla al hospital para yo seguir a mi trabajo. A éste punto eran las 2:00p.m. Mi esposa llegó al hospital a las 2:45p.m. y yo a mi trabajo a las 3:15p.m. Al finalizar mi día de trabajo, me uní a mi esposa quien trataba de controlar a una Camila muy contenta y activa, debido al efecto de 3 nebulizaciones para el Asma.

Para no hacer el cuento más largo, llegamos a casa de mis suegros pasadas las 10 de la noche a tener la primera comida formal del día... y a jugar las carreras con Camila, quien todavía andaba por las nubes mientras nosotros nos arrastrábamos del sueño.

Hoy escribí tarde porque tuvimos que dormir en Boston para evitar un accidente por el sueño. Por estar tan cerca de la oficina, me confié y me levanté tarde, aunque tenía que escribir temprano.

Todo lo anterior podría sonarles en forma de QUEJA, pero en realidad no lo fue. Gracias a Dios y las oraciones de mi esposa, cada vez que me mojé en la lluvia, cada susto que me dí con el suicida que manejaba la grúa, pude mantenerme calmado y no QUEJARME.

La QUEJA no resuelve nada. Sólo agrega mal olor a una situación que de por sí ya huele mal. Lo peor es que pensamos que la QUEJA no afecta a nadie, cuando en realidad la QUEJA nos enferma el alma, cansa y aleja a todo el que nos rodea y sobretodo causa molestia al corazón de Dios, contra quien realmente nos QUEJAMOS.

El autor inglés Samuel Johnson dijo: "Sólo el hombre nace llorando, vive quejándose y muere decepcionado."

Es una tendencia humana inclinarnos a ver las cosas malas que nos suceden como el juicio que Dios nos está haciendo de manera injusta... y nos QUEJAMOS... como si esto fuera a mejorar las cosas.

La QUEJA sólo empeora tu actitud frente a las cosas, te imposibilita la visibilidad de lo que debes aprender y no permite que Dios haga lo que quiere hacer en ti. La QUEJA no cambia la situación, la QUEJA cambia el resultado de la situación en ti... y siempre es para mal.

La QUEJA en la Biblia comenzó con Adán y Eva, quienes a pesar de haber metido las 4 patas, todavía tienen la osadía de culpar a Dios por haber creado al próximo que queda al lado, porque en definitiva... lo que sucede no es mi culpa... es culpa de Dios.

1¡Ya estoy harto de esta vida! Por eso doy rienda suelta a mi queja; desahogo la amargura de mi alma. 2Le he dicho a Dios: No me condenes. Dime qué es lo que tienes contra mí. (Job 10:1-2 - NVI)

Estas son palabras de Job justo en el centro de la "Prueba de su Vida". Sólo imagínate que Dios hubiera concedido la queja de Job y le hubiera quitado la vida... Dios no hubiera repuesto y aún mejor, todo lo perdido... El problema de la QUEJA es que nos abre la boca con palabras tontas que pueden y van a marcar para mal lo siguiente que nos pasará. Tus palabras condionan tu mente, tu corazón y tu entorno... úsalas bien.

Mientras escribo, me llamó el mecánico para informarme que la pieza que necesita mi carro es más cara y que no llega hasta el lunes, o sea que estoy a pies y tengo que buscar más dinero para el arreglo, pero decido no quejarme porque en el proceso he aprendido a esperar y depender de Dios, y eso es lo que importa.

1Job respondió entonces al Señor. Le dijo: 2«Yo sé bien que tú lo puedes todo, que no es posible frustrar ninguno de tus planes. 3"¿Quién es éste —has preguntado—, que sin conocimiento oscurece mi consejo?"Reconozco que he hablado de cosas que no alcanzo a comprender, de cosas demasiado maravillosas que me son desconocidas. 4»"Ahora escúchame, que voy a hablar —dijiste—; yo te cuestionaré, y tú me responderás." 5De oídas había oído hablar de ti, pero ahora te veo con mis propios ojos. 6Por tanto, me retracto de lo que he dicho, y me arrepiento en polvo y ceniza.» (Job 42:1-6 - NVI)


No te QUEJES porque al final, TODA situación tendrán sentido. Serás mejor y estarás mejor preparado para la vida, pero sobre todas las cosas habrás conocido al Señor tu Dios y esa es la razón por la que respiras...

JUST SAYING!!!

Dios te bendiga,

Pastor D
David Pimentel



2 comments:

Yamelly dijo...

ok so no habia leido este tema porke en realidad me estado kedando por alrededor de 2 semanas. so sabia ke el tema me iva a confrontar, y eso no siempre nos gusta. pero admito que estuvo muy bueno y muy diferente a lo ke espera escuchar.... me gusto= confrontada y confortada. :)

Pastor D: David Pimentel dijo...

Amén. Little secret: A mi también...

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