Siendo totalmente honesto, pensaba que algo extraordinario sucedía con una persona cuando se "convertía" en cristiano... y sucede algo extraordinario, pero no con la rapidez y visibilidad que pensaba. No se... creía que se me otorgarían súper poderes... que podría ver los demonios... flotar de vez en cuando... NO ESTOY EXAGERANDO.
Luego acepté seguir a Jesús y me di cuenta de que todo lo que pasó... sucedió por dentro y que las demostraciones externas, tomaron tiempo antes de llegar a la superficie. Había iniciado un PROCESO.
Y el Niño (Jesús) crecía y se fortalecía, llenándose de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre El.
Dios ama los procesos. Todo lo creado responde a un proceso donde cada cosa inicia, se desarrolla y se multiplica... lamentablemente, con la inclusión del pecado, hay que agregar una cuarta fase al proceso que es la muerte... y es igual con el proceso de conocer y seguir a Jesús: Te enteras de que Jesús tiene algo para ti (inicia), le sigues (desarrollas) y le obedeces (multiplicas)... el final cambia, porque el cierre del proceso no existe... sólo somos promovidos.
Me preocupo mucho al ver a predicadores presionar, obligar y manipular personas para que tomen la decisión de seguir a Jesús. Los asustan, los presionan y muchas veces logran que las personas pasen adelante y repitan una oración sin corazón... luego celebran la gran cantidad de conversiones. Puedo asegurar que TODO el que ha ido a un Iglesia evangélica, se ha "convertido" aunque sea una vez... aún cuando eso no haya producido ningún cambio en su vida... aún cuando el día siguiente a su "conversión" haya decidido hacer lo mismo que siempre ha hecho.
Sólo quiero aconsejarles algo: Conocer, seguir y obedecer a Jesús es un PROCESO que inicia con una oración o declaración de fe, pero que no nace en el miedo, ni la presión, ni los labios, sino que nace en el corazón. Cuando se presiona o manipula, la gente se convierte, pero en hipócritas porque para que los dejen tranquilos, simplemente aceptan la oración, pero no a Jesús... de hecho, muchos son alejados por la manera en que los trataron en esa experiencia.
Jesús fue claro... La invitación de Jesús no fue "conviértete", sino sígueme... mira lo que hago... mira cómo lo hago... mira porqué lo hago. Es en el convivir con Jesús y relacionarte con sus cosas que nuestro corazón se va "convirtiendo" a un nuevo corazón con nuevos intereses.
Vive tus procesos... si los violentas, aunque celebren que has progresado, será un mentira porque te habrás adelantado a tu propio progreso. Tu cuerpo podría estar en otra etapa, pero tu corazón y tu mente quedarán abandonados en etapas sin agotar... No hay nada más triste que una persona que abandona su corazón y su mente en etapas pasadas por la seducción de que su cuerpo sea promovido a nuevas posiciones. Jesús te ama completo... y de hecho, no hay manera de que entregues sólo una parte de ti...
JUST SAYING!!!
Pastor D
David Pimentel
0 comments:
Publicar un comentario