Hace unos días, Camila estaba cantando: "Cambiaré mi Princesa... Cambiaré mi lolol..." Yokasta no entendía... Le decía: "Camila canta de nuevo"... Camila cantaba: "Cambiaré mi Princesa... Cambiaré mi lolol..." Hasta que en un momento Yokasta entendió... Camila había personalizado la canción Cambiaré mis Tristezas de Israel Houghton... Camila llama "Princesas" a sus muñecas...
Para nosotros no es una sorpresa que ella cantara una canción de alabanza cristiana, pero su acción me provocó a un pensamiento. ¿Qué tal si cada uno de nosotros personalizara su alabanza? Yo sé que he hablado en otra ocasión hablé de: ¿Cuál es tu Canción?... pero es que creo que es un aspecto muy importante y Dios sigue trayéndolo a mi cabeza.
En mi vida, lo que siento es que Dios me está gritando que personalice mi alabanza, que personalice mi oración... que personalice mi estudio de la Palabra, que personalice mi vida de devoción... que personalice mi vida de discípulo tal y como Jesús se hizo persona para poder ajustarse a nuestra gran necesidad... Eso quiere decir personalizar... Adaptar algo a las características y necesidades de una persona.
Es fácil seguir a Jesús... pero mantener una vida de devoción a Dios y de continuo crecimiento, requiere mucho de nosotros... Erróneamente nos empujan a adaptar las fórmulas de grandes líderes, pero eso es como cuando David se puso la armadura de Saúl para pelear contra Goliat... Simplemente no le quedaba...
Lo que digo es que la armadura prestada no te permitirá pelear contra tu gigante... agarra la honda y recoge un par de piedras... Busca cuál es la honda que Dios te ha dado y persigue conectarte con El de esa manera.
¿Eres contemplativo? Siéntate junto a un lago... Da una vuelta al parque caminando... ¿Eres servicial? Sirve a las personas y alaba a Dios mientras... comparte tu experiencia con otros mientras sirves... ¿Te gusta la lectura? Lee y pide dirección a Dios en tu lectura para que te muestre nuevas cosas... ¿Te gustan los niños? Haz de niñera para un pareja de amigos que necesiten una noche a solas y mientras haces de niñera, intenta aprender de ellos para que puedas "ser como un niño para entrar al Reino de los Cielos", tal y como Jesús dijo. ¿Te gusta bailar? Baila en tu Iglesia y piénsate bailando en la presencia de Dios para Su deleite... Las posibilidades son infinitas...
Hoy no tengo un buen verso Bíblico para darte y darle peso a mi pensamiento, pero si de algo te cuenta mi testimonio quiero decirte que me ha salvado la vida más de una vez el haber explorado opciones de conexión con Dios para mantener las vías abiertas con Dios...
Reinventa tu vida de adoración y devoción... Rediséñala... Tal y como Camila... Como me ha estado pidiendo una muñeca nueva... o una "princesa" nueva... ella cantó "Cambiaré mi Princesa"... ¿Porqué no lo tratas? Este fin de semana es un buen momento...
JUST SAYING!!!
Dios te bendiga,
Pastor D
David Pimentel
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