Hoy mientras viajaba en el tren a mi trabajo, un niño lloraba desesperado. Se veía asustado. La madre se molestó y lo maltrataba... Lo jaloneaba, le gritaba... Le decía: "No eres un bebé"... El niño avergonzado y con su cara llena de lágrimas, miraba las personas al frente.
Me acerqué a la señora mientras cargaba un juego en mi teléfono y le pregunté a la madre si se lo podía prestar... "Claro", me dijo...
El niño reconoció el juego y con temor... mirando a su madre... aceptó el teléfono y comenzó a jugar. Le pregunté a la mujer: "¿Cuántos años tiene?" "4" contestó... El niño jugaba... Le dije: "Mi niña tiene 4 y también se pone nerviosa y se asusta cuando hay mucha gente que no conoce..."
El niño se calmó, la mujer se calmó, mi corazón se conmovió... Miré al niño y le dije a la señora: "Sólo estaba asustado"... Gente me miró como si estuviera loco al darle mi "iPhone" a un niño malcriado de 4 años... Entonces recordé:
Por eso, aunque estábamos muertos por culpa de nuestros pecados, él nos dio vida al resucitar a Cristo. Nos hemos salvado gracias al amor de Dios.
Eso hizo Dios con nosotros. Cuando estábamos gritando y pataleando, asustados... "Haciéndole pasar vergüenzas"... Dios nos dio su ¿iPhone?... NO... Dios nos dio a Jesús... ¿Lo aceptas?
Dios amó tanto a la gente de este mundo, que me entregó a mí, que soy su único Hijo, para que todo el que crea en mí no muera, sino que tenga vida eterna.
JUST SAYING!!!
Pastor D
David Pimentel
0 comments:
Publicar un comentario