martes, 17 de abril de 2012

No es el Zafacón... Son las Bolsas de Ropa

No sé si por tradición, decisión o maldición, en todos los lugares que hemos vivido, hemos tenido un cuarto de regueros. Ha sido un gran desahogo, pero en ocasiones se complica... como en el pasado Congreso Juvenil.

Durante el tiempo de planificación y sobre todo durante las últimas semanas antes del Congreso, mi esposa no pudo acomodar la  ropa limpia... tampoco la ropa se organizó por sí sola y se amontonaron un par de bolsas.


Luego del Congreso, un par de cosas entraron a ese cuarto para no tener regueros en otros lugares de la casa... las cosas se colocaron detrás de las bolsas de ropa... y las bolsas se movieron un poco más hacia el centro del cuarto.

Hace un par de días, mi esposa y yo nos encontramos en esa habitación. Yo me estaba vistiendo y le pedí que cerrara la puerta pero el zafacón estaba en el medio... Mi esposa me dijo: "El zafacón no deja que la puerta cierre." Luego imaginé lo que el zafacón diría... claro, si pudiera hablar... Lo imaginé diciéndonos: "No soy yo... Son las Bolsas de Ropa"... y ahí nació esta reflexión.

Hay muchas puertas en nuestra vida que no pueden cerrar... de pronto un pequeño obstáculo se asoma y le gritamos al obstáculo... obviando y tratando de olvidar la causa real... "No es el Zafacón...Son las Bolsas de Ropa". Bolsas de odio, bolsas de rencor, bolsas de resentimiento, bolsas de amargura, bolsas de irresponsabilidad, bolsas de infidelidad, bolsas de indiferencia, bolsas de falta de amor. No es el zafacón, no es tu empleo, ni tu jefe, no es tu pareja la que no permite que la puerta cierre, ni la situación mejore, o el conflicto termine... SON LAS BOLSAS DE ROPA.

Hay una invitación y, casi una demanda de parte de Dios en el libro del profeta Isaías:
"18 Y ahora, Dios le dice a su pueblo: "No recuerden ni piensen más en las cosas del pasado. 19 Yo voy a hacer algo nuevo, y ya he empezado a hacerlo. Estoy abriendo un camino en el desierto y haré brotar ríos en la tierra seca."

Dios está listo para bendecirte... Llegó el momento de que te pongas tu ropita de persona madura... Póngase su traje de hombrecito o mujercita, y recuerde que no es el zafacón... son las bolsas de ropa. Vaya a deshacer esas bolsas, acepte y aprenda de su pasado, acomode y ordene su presente... y prepárese porque lo mejor está por venir...

JUST SAYING!!!

Dios te bendiga,

Pastor D
David Pimentel

2 comments:

Jiana M. dijo...

HAHA I like this one a lot! Yo siempre cuando termino de limpiar mi cuarto lleno una bolsa de cosas miscelaneas y digo, aaayy mañana lo organizo! y cada vez que limpio hago lo mismo hasta que tengo un monton de bolsas. Un dia mami limpio mi cuarto y boto todas las bolsas que tenia. Yo le reclame y ella me dijo que yo ni sabia lo que estaban en esas bolsas. Asi pasa muchas veces.. que tenemos tantas bolsas y las guardammos diciendo son importantes! no puedo dejar las ir! o, mañana arreglo eso per al fin y al cabo se nos olvida, y las dejamos ahi haste que viene alguien (Dios) y bota las bolsas con todo y paquete, forzandonos olvidarlas

Pastor D: David Pimentel dijo...

Hey Jiana... No sabía que leías... Muy buen comentario. Bendiciones.

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